Es una «carnosidad» de color blanco rojizo en la conjuntiva del ojo que invade progresivamente la córnea. Suele ser más común en el lado cercano a la nariz, aunque puede afectar ambos lados1 .
Es una masa blanca-amarillenta que se presenta en la conjuntiva, pero no invade la córnea. Generalmente aparece cerca de la nariz y puede aumentar de tamaño con el tiempo.
Las principales causas de pterigión y pingüecula incluyen:
- Exposición a rayos ultravioleta (principal causa)
- Polvo
- Viento
- Sequedad ocular
- Factores hereditarios
Aunque en muchos casos pueden ser asintomáticas, estas condiciones pueden causar:
- Enrojecimiento y/o inflamación
- Sensación de cuerpo extraño en el ojo
- Irritación constante
- Lagrimeo
- Sequedad ocular
- Picazón y ardor
- Visión borrosa
- Afectación estética
Para prevenir estas condiciones se recomienda:
- Usar lágrimas artificiales para mantener los ojos lubricados
- Utilizar gafas de sol y sombreros para protegerse de los rayos UV
- Usar lentes protectores en ambientes con mucho polvo o contaminantes
Pterigión
El tratamiento principal es quirúrgico. Se indica cirugía cuando:
- El pterigión invade parte de la córnea y/o afecta la visión
- Hay episodios recurrentes de irritación o crecimiento
- Interfiere con el uso de lentes de contacto
- Afecta estéticamente
La cirugía se realiza con anestesia local, retirando el pterigión y aplicando un injerto conjuntival. Se pueden usar suturas o pegamento biológico para fijar el injerto
- Mantener el parche seco
- No frotarse los ojos
- Acudir a curaciones y controles según lo indicado
- Aplicar los colirios recetados
- Usar gafas de sol con protección UV
- Evitar piscinas, saunas y aguas de río por al menos un mes
El pterigión y la pingüecula son condiciones oculares comunes que pueden afectar la salud visual. La prevención mediante protección ocular y el tratamiento adecuado son fundamentales para manejar estas condiciones. El Hospital «Dr. Walter Arzabe» ofrece tratamientos avanzados y cirugías para estas y otras condiciones oculares